Una batería consiste principalmente en placas positivas y negativas aisladas unas de otras por separadores y sumergidas en un líquido ácido (electrolito). Dichas placas consisten en rejillas de aleación de plomo impregnadas con una mezcla de ácido sulfúrico, óxido de plomo y agua, que constituye el ingrediente activo. Esta pasta es capaz, gracias a una reacción química con el electrolito, de suministrar corriente.
Historia de la batería
Hablando de la historia de las baterías, está claro que el primero que contribuyó a su creación fue Alessandro Volta, aunque este no descubrió cómo hacer que la batería galvánica fuese recargable. Otro científico alemán, Joseph Sinsteden, fue quien observo el efecto de obtener una corriente continua a través de la inmersión de las placas de plomo en ácido sulfúrico, pero no pudo extraer de esta experiencia ninguna conclusión que pudiera ser llevada a la práctica. El científico francés Gaston Plante fue quien creó en 1859 la batería de plomo / ácido, la primera batería eléctrica recargable.
Inventor de la batería
El inventor de la bombilla, el estadounidense Thomas Edison, estaba muy interesado en la todas las propiedades de las baterías que se podían recargar. Primero pensó en usar estas baterías para el transporte y ayudó a iniciar la producción de baterías para automóviles. Edison no solo fue un gran científico, sino también un hombre con una mente práctica, y gracias a él, la electricidad ha sido puesto al servicio de la humanidad.
La mayor parte del proceso de almacenamiento de energía en las baterías de plomo-ácido no ha cambiado, aunque sí lo han hecho los materiales utilizados en su producción. Los viejos contenedores de ebonita de las baterías han sido reemplazados por contenedores de polipropileno. La ebonita es un material menos resistente a los golpes, y, además, el polipropileno es mucho menos costoso.
Las baterías modernas de los coches
La batería de automóvil moderna siempre consiste en placas de plomo separadas de dióxido que se sumergen en una solución de electrolito preparada con una mezcla de agua desmineralizada y ácido sulfúrico con una variedad de aditivos que mejoran sus propiedades, pero las últimas tecnologías utilizadas en la fabricación de baterías para automóviles han mejorado significativamente su rendimiento.
Reducen la corrosión, aumentan la vida útil de la batería, mejoran la recepción y la retroalimentación de la carga eléctrica, reducen la pérdida de agua y el ingrediente activo, además de aumentar la temperatura al incrementar la resistencia a las heladas. Algunos dispositivos adicionales, como los indicadores, pueden ser utilizados para monitorear el nivel de carga de la batería.
La ventaja más importante de las baterías modernas puede ser el aumento de la corriente durante el arranque, que proporciona un arranque al motor en todas las condiciones de temperatura y una mayor vida útil de la batería debido a la reducción de las auto descargas.